El vitel toné es un plato que ha conquistado paladares en todo el mundo, siendo originario de la región del Piamonte en Italia. Esta es una receta deliciosa y ligera, perfecta para la temporada de verano ya que se sirve fría y se puede preparar con anticipación.
No obstante, no es casualidad que también se posicione como uno de los entremeses más destacados durante las festividades navideñas, siendo ideal para cenas, comidas y celebraciones de Nochevieja.
Descubre cómo preparar paso a paso la receta clásica y deliciosa de vitel toné que impresionará a tus invitados.
¿Cómo se prepara el vitel toné?
El primer paso es la preparación de la ternera, un proceso sencillo que solo requiere una cacerola y una «salsa» de hierbas y verduras para sazonarla de manera perfecta. Sin embargo, tras la cocción, el verdadero secreto reside en la salsa de atún, la auténtica estrella de la receta.
El sabor del vitel toné depende en gran medida del acierto de la salsa, siendo crucial utilizar el caldo de la cocción de la ternera para amalgamar los ingredientes. La proporción adecuada del caldo con los demás componentes asegurará la consistencia perfecta para realzar el sabor de la ternera.

La receta original del vitel toné
8
raciones35
minutos45
minutos230
kcal5
g2
g1,5
g1
hora20
minutosIngredientes
800 g de ternera
1 zanahoria
3 tallos de apio
1 hoja de laurel
2 cebollas
1 diente de ajo
200 ml de vino blanco
1,5 l de agua
1 cucharada de aceite de oliva virgen extra
sal al gusto
pimienta al gusto
- Para la salsa de atún
2 huevos
100 g de atún bien escurrido en aceite
2 filetes de anchoa en aceite bien escurridos
5 g de alcaparras saladas, enjuagadas
salvia al gusto
perejil al gusto
alcaparras para decorar
Instrucciones
- Atar la carne de ternera con una red o hilo para cocinar para mantener su forma durante la cocción.
- Pelar las cebollas y la zanahoria, luego cortarlas en trozos. Picar el apio después de lavarlo.
- Colocar la carne de ternera en una olla. Agregar el apio, la zanahoria, las cebollas, la hoja de laurel, una pizca de sal, pimienta, una cucharada de aceite de oliva virgen extra, el vino blanco y cubrir con agua.
- Llevar a ebullición y cocinar durante 40-45 minutos (calculando 30 minutos de cocción por cada 500 g de carne). De vez en cuando, retirar la espuma que se forme en la superficie.
- Mientras la carne y el caldo se cocinan, preparar los huevos duros: sumergir los huevos en una cacerola con agua fría, encender el fuego y cocinar durante aproximadamente 9 minutos desde que comiencen a hervir.
- Escurrirlos, enjuagarlos con agua fría y dejar que se enfríen completamente antes de pelarlos.
- Cuando la carne esté lista, preparar la salsa de atún: colocar los huevos cortados en un tazón, agregar el atún, las alcaparras, unos cucharones de caldo y las verduras. Triturar con una batidora de inmersión hasta obtener una mezcla suave, añadiendo más caldo si es necesario. También añadir las anchoas y volver a batir.
- Cortar la carne de ternera en rodajas finas y servir con la salsa de atún, decorando con hojas de salvia, alcaparras y perejil.
- ¡A disfrutar del vitel toné!
Propiedades nutricionales y calorías
Una porción de vitel toné, siguiendo la propuesta ofrecida por ManzanaRoja, aporta aproximadamente unas 230 kcal por porción. La receta incluye diversos ingredientes nutritivos que desempeñan un papel crucial en el bienestar general. A continuación, encontrarás información detallada de cada uno de ellos:
- La carne de ternera, con 110 calorías por cada 100 gramos, se posiciona como una fuente significativa de proteínas de alta calidad y valor biológico elevado. Estas proteínas son esenciales para fortalecer los anticuerpos que protegen contra virus y bacterias estacionales. Además, la carne de ternera proporciona vitamina B1, zinc y selenio, oligoelementos esenciales para el adecuado funcionamiento del sistema inmunológico. Asimismo, presenta cantidades considerables de potasio, fósforo y hierro.
- Los huevos utilizados en la elaboración de la salsa también contienen proteínas nobles, que poseen todos los aminoácidos esenciales, especialmente la leucina. Aportan ácido oleico, presente también en el aceite de oliva, así como ácidos poliinsaturados omega-6, que brindan protección contra enfermedades degenerativas y cardiovasculares. Además, contienen una cantidad apreciable de retinol, que se transforma en vitamina A en el organismo, crucial para la salud de la piel, el cabello y los ojos. No obstante, se recomienda moderar su consumo en caso de colesterol elevado.
- Las verduras presentes en el plato, como zanahorias, apio y cebolla, aportan valiosas vitaminas, fibra y minerales. Las zanahorias, por ejemplo, proporcionan carotenoides y vitamina A; el apio contribuye con una cantidad significativa de vitamina C, fortaleciendo el sistema inmunológico y previniendo enfermedades estacionales. Por su parte, la cebolla posee propiedades antitrombóticas y ayuda a reducir el colesterol gracias a su contenido rico en fibra. Además, es rica en antioxidantes que contrarrestan la acción de los radicales libres.