La prediabetes es una afección que precede a la diabetes de tipo 2: se caracteriza por niveles elevados de glucosa en sangre, más altos de lo normal, pero aún no lo bastante altos como para diagnosticar la enfermedad. Muchas personas padecen esta enfermedad, pero no siempre son conscientes de ello. Por ello es importante conocer qué es la prediabetes y como afrontarla.
Prediabetes: una enfermedad reversible
La prediabetes no es una enfermedad real, sino una afección que aún es reversible. De hecho, las directrices europeas más recientes sugieren un término más correcto, el de “intolerancia a la glucosa”, precisamente para subrayar que esta afección no condena necesariamente a una persona a convertirse en diabética. De hecho, la prediabetes debe considerarse, más que una enfermedad, un factor de riesgo no sólo para la diabetes en sí, sino también para las enfermedades cardiovasculares.
Una afección silenciosa, en definitiva, que por tanto puede estar presente sin manifestar ningún síntoma. Según datos publicados por el Programa Estadounidense de Prevención de la Diabetes, el 11% de las personas con prediabetes desarrollan diabetes de tipo 2 en un plazo medio de tres años, mientras que uno de cada cuatro pacientes lo hace en cinco años.
Prediabetes: valores de riesgo
La prediabetes es una afección que consiste en tener valores de glucosa en sangre superiores a los normales: sin embargo, comprender qué valores se consideran de riesgo no es fácil. De hecho, la definición de estos parámetros cambia según se tengan en cuenta las indicaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) o las de la Asociación Americana de Diabetes (Ada). Según la primera, el límite superior de glucemia normal en ayunas es de 110 mg/dl, mientras que para la segunda es de 100 mg/dl. En cualquier caso, para quienes superan estos valores de forma continuada, el riesgo de desarrollar la enfermedad es una vez y media mayor que para quienes tienen valores normales de glucosa en sangre (OMS).
Síntomas y personas de riesgo
Como ya se ha mencionado, los síntomas suelen ser silenciosos, pero no es cierto que no se pueda ser consciente de una condición de prediabetes y luego ahondar en el problema con pruebas específicas. Pero, ¿quiénes son los que corren más riesgo de padecer prediabetes?
- Personas con sobrepeso mayores de 45 años;
- Las personas con sobrepeso, aunque menores de 45 años, pero que presentan otros factores de riesgo de diabetes.
En términos más generales, las personas con riesgo de padecer prediabetes y diabetes son aquellas que:
- Tienen sobrepeso y no realizan actividad física.
- Tienen antecedentes familiares de diabetes (familiares directos como padres o hermanos).
- Mujeres que han padecido diabetes gestacional durante el embarazo.
- Quienes padecen hipertensión y tensión arterial alta en general.
- Personas que tienen niveles elevados de colesterol y triglicéridos.
Cómo saber si eres prediabético
Si crees que tiene prediabetes, averiguar el problema no es difícil. Existen varias formas de evaluar el estado de intolerancia a la glucosa:
- El análisis de los niveles de glucosa en sangre en ayunas con un análisis de sangre;
- La prueba ocasional de glucosa en sangre plasmática (no es necesario que sea en ayunas).
- La prueba de tolerancia oral a la glucosa.
- Con estas pruebas, el médico puede evaluar si su metabolismo es normal, si tiene prediabetes o si padece diabetes de tipo 2.
Por lo general, las pruebas se realizan en secuencia: por ejemplo, si tu glucemia en ayunas es sistemáticamente superior a 110 pero inferior a 126 mg/dl (glucemia alterada en ayunas), lo mejor es realizar la prueba de tolerancia oral a la glucosa. En cualquier caso, siempre es necesario consultar al médico, que prescribirá las pruebas más adecuadas para el caso concreto.
Tratamiento y prevención de la prediabetes
Numerosos estudios han demostrado que quienes padecen prediabetes pueden retrasar el curso de la enfermedad: cambiando tu estilo de vida, hasta el 58% de los casos de prediabetes pueden volver a un estado normal.
La importancia de la nutrición
La primera condición que hay que superar para que los niveles de azúcar en sangre vuelvan a la normalidad es la de una nutrición incorrecta: favorecer ciertos alimentos en detrimento de otros puede tener un impacto enorme. En particular, las personas en estado prediabético deben:
- Apostar por el pan, la pasta y los cereales integrales.
- Limitar drásticamente los dulces.
- Disminuir la ingesta de grasas animales saturadas, favoreciendo las llamadas grasas buenas o insaturadas, como los omega 3 y omega 6.
- Optar por alimentos bajos en calorías y ricos en fibra y antioxidantes, como las frutas y verduras frescas.
- Optar por métodos de cocción más ligeros para cada alimento, como a la plancha, al vapor o al horno, en lugar de freír.
- Utilizar sartenes y ollas antiadherentes para reducir el consumo de aceite, especialmente de mantequilla.
- Comer más verduras y más alimentos integrales.
El papel de la actividad física
Por supuesto, como ocurre con muchas afecciones, la actividad física es una clave importante que a menudo se subestima. Los expertos aconsejan a los enfermos de prediabetes no sólo perder entre el 5% y el 10% de su peso, sino también realizar cualquier actividad física de intensidad moderada durante media hora al día.
Si llevas una vida inactiva, puede parecer difícil cambiar de estilo, pero no es así. De hecho, se necesita muy poco para aumentar la actividad física:
- Dar un paseo de 30 minutos cada día: puedes dividir este tiempo en 2 o 3 paseos de diez minutos.
- Encuentra una actividad al aire libre que te satisfaga, como paseos en bicicleta o clases de gimnasia al aire libre.
- Sube por las escaleras en lugar de coger el ascensor. Si utilizas el coche para desplazarte, intenta aparcar lo más lejos posible.
- Prueba también el entrenamiento de fuerza, levantando pesas no pesadas varias veces al día.
Fármacos
Hasta la fecha no se ha aprobado oficialmente ningún fármaco para la prediabetes, aunque existen varios medicamentos de venta con receta para tratar la diabetes que se están evaluando también para la prediabetes.
Para esta afección, que, como hemos precisado, es reversible, la mezcla de una alimentación equilibrada y deporte parece ser la mejor solución, que puede alejar el fantasma del desarrollo de la diabetes de tipo 2.
¿Te ha gustado nuestro artículo? Compártelo en Pinterest.
